Esta no po, efectivamente esta no va a servir para nada, pero no puede serpilitica de la universidad censurar temas, porque nos prohibiriamos cuestionarnos todo en el futuro.
Le pusiste color censurar cosas que objetivamente están mal como la apología a la pedofilia, no hará que la sociedad deje de cuestionarse cosas. Lo bueno es que todos los que hablan de libertad de expresión en todo ámbito, con esto se dan cuenta que no puede ser a todo ámbito
Ni siquiera es una investigación cientifica, si fuese así no hay problema, al contrario, mejor saber que pasa en la mente de los pedófilos para prevenir delitos sexuales contra menores de edad. Esta wea la escribió un retardado no más que cree que está bien tener sexo con niños y que estos tengan una vida sexual activa sin reprimir
de lo poco que alcance a leer me sorprendo la cantidad de eufemismos utilizados para tapar el intento de validación de una hipotética relación adulto-menor.
“menores de deseo inquieto”
“diálogo corporal entre adulto e infante”
Son todas mayores de edad.
No he visto ningún posteo de niños o niñas siendo sexualizados/as.
(El día que alguien lo haga se llevara la tremenda pata en la raja en todo caso)
No era division. Era porcentajes y proporcionalidad.
A todo esto. Se metio un monto de gente al tema (politicos incluidos) y nadie opina ni siquiera similar a ti
Si nos ponemos serios y rigidos, yo creo en el mismo cajon de la “teoria” que habla la tesis, pasa bastante piola los weoncitos que hablan de lolis como si fuera algo super normal y sano total son dibujos
Pero hay loliconeros que no lo ven como algo sexual, les gusta por otros motivos como a esos que les gusta my little pony. De hecho al unico weon que he conocido que le gustan las lolis y esos ponys era de esos ñoños a la antigua que ni le interesaban las minas, apostaría que a día de hoy debe seguir siendo virgen.
Se puede sentir desde temprano la potencia de las ocurrencias imaginarias, y no se sabe a quién o por qué pedir perdón, como cuando se desea besar la boca de la hermana o del hermano, o se mira a hurtadillas y fascinación el pene salido de su capucha en un perro callejero, o se escucha a los cuerpos de los padres haciendo movimientos y ruidos turbadores